PrEP
La PrEP (siglas en inglés de profilaxis preexposición) es una herramienta de prevención del VIH. Las autoridades sanitarias de Estados Unidos aprobaron su uso en 2012, después de que algunos estudios demostraran su seguridad y eficacia. Desde entonces, otros países de todo el mundo también lo están haciendo para hacerla accesible a las personas con más riesgo de infectarse. ¿En qué consiste la PrEP?
La PrEP es una estrategia de prevención del VIH que consiste en que personas VIH-negativas utilicen medicamentos antirretrovirales para reducir su riesgo de infectarse. De acuerdo con la evidencia científica, tiene una efectividad de casi el 100% para evitar la transmisión del VIH en las personas que la usan de manera consistente.
¿Qué diferencia hay con la PEP?
La profilaxis postexposición (PEP) también es una estrategia de prevención del VIH en personas VIH-negativas que toman antirretrovirales pero en este caso lo hacen después de haber sido potencialmente en contacto con el virus. La PEP es un tratamiento con una duración de 28 días que se dispensa a los servicios de urgencias de los hospitales públicos. Debe iniciarse lo antes posible, preferentemente en las primeras 6 horas después de la exposición, y como máximo dentro de las 72 horas posteriores a la misma.
¿A quién se aconseja la PrEP?
Expertos y organismos reguladores como la OMS (Organización Mundial de la Salud) o la Sociedad Europea Clínica del Sida (EACS) recomiendan la PrEP a las personas sexualmente activas que pertenecen a los grupos de población más expuestos al VIH con los hombres gais, bisexuales, otros hombres que tienen sexo con hombres y mujeres transexuales a la cabeza.
¿Qué medicamento se usa?
Aunque hay otros en estudio, por ahora el único medicamento aprobado para hacer PrEP recibe el nombre comercial de Truvada. Se trata, de hecho, de una píldora que combina dos medicamentos: Emtriva (emtricitabina o también llamada FTC) y Viread (tenofovir también llamado disoproxil fumarato o TDF).
¿Tiene efectos secundarios?
Los medicamentos que se utilizan para la PrEP son muy seguros y con un bajo perfil de toxicidad. La mayoría de las personas que los toman no experimentan efectos secundarios y si estos se presentan suelen ser leves. Sin embargo, la PrEP debe estar prescrita y hacerse siempre con el seguimiento de un médico especialista para garantizar su seguridad.
¿Y si la tomo por mi cuenta?
En los países donde todavía no se ha aprobado la PrEP, algunas personas deciden seguir esta estrategia preventiva por su cuenta, ya sea consiguiendo Truvada en el mercado negro o legalmente a través de la importación de genéricos para uso personal como es el caso del Reino Unido. Si te planteas hacer PrEP por tu cuenta debes tomar algunas precauciones: asegurarte que este medicamento no sea contraindicado en tu caso, verificar que no estás infectado por VIH y someterte periódicamente a controles médicos. Si es tu caso, en BCN Checkpoint podemos orientarte sobre cómo minimizar los posibles riesgos que puede conllevar hacer PrEP en estas condiciones.